Table of content
An Giang impulsa el desarrollo del turismo comunitario
Poseedora de los recursos culturales de las comunidades Cham y Khmer, así como de paisajes únicos, An Giang aún no ha explotado plenamente el potencial del turismo comunitario para generar medios de vida sostenibles para la población local.
El 2 de diciembre, la Administración Nacional de Turismo de Vietnam, en coordinación con el Departamento de Turismo de An Giang, organizó el seminario “Desarrollo sostenible del turismo comunitario en las zonas de minorías étnicas y montañosas”. El evento forma parte del Programa Nacional Objetivo para el desarrollo socioeconómico en estas regiones, y atrajo a más de 100 participantes, incluidos organismos estatales, expertos, empresas de viajes y representantes comunitarios.
Previamente, una delegación de la Administración Nacional de Turismo realizó una inspección de dos días en puntos turísticos destacados de la provincia, como el templo de Bà Chúa Xứ en la montaña Sam, la aldea Cham de Châu Phong, el bosque de melaleucas Trà Sư y varios talleres artesanales tradicionales. Los resultados mostraron una imagen del turismo comunitario con gran potencial, pero también con varios “cuellos de botella” que requieren soluciones.
Valores culturales autóctonos
An Giang es actualmente el hogar de una comunidad multiétnica compuesta principalmente por Kinh, Hoa, Cham y Khmer. Esta convergencia cultural crea un ecosistema turístico humanístico único en el delta del Mekong.
En la aldea Cham de Châu Phong, los visitantes pueden experimentar el ambiente cultural islámico con la mezquita Mubarak, visitar talleres de tejido tradicional y degustar el plato típico “tung lò mò” (salchicha de res). Mientras tanto, la región de Bảy Núi conserva una fuerte identidad cultural Khmer con templos antiguos, festivales de carreras de bueyes y artes escénicas tradicionales.
Nguyễn Thị Hoa Mai, subdirectora de la Administración Nacional de Turismo de Vietnam, señaló que An Giang tiene una posición estratégica como puerta hacia el mar y la cabecera del río Mekong. Los recursos turísticos no sólo radican en su paisaje natural —como el monte Cấm o el bosque de Trà Sư— sino, sobre todo, en los valores culturales autóctonos. La tendencia mundial del turismo se orienta hacia modelos verdes y responsables, donde los visitantes buscan experiencias auténticas junto a la comunidad local.
“Sin embargo, la realidad muestra que los modelos de turismo comunitario aquí siguen fragmentados. La mayoría de las actividades son espontáneas, de pequeña escala y carecen de vínculos sólidos para formar una cadena de valor”, afirmó Hoa Mai.
Superar obstáculos en recursos humanos y productos
En el seminario, muchos participantes señalaron que el mayor desafío actual es la limitada capacitación turística de las comunidades étnicas. Los habitantes están acostumbrados a la vida agrícola y carecen de conocimientos sobre atención al cliente, creación de productos turísticos o promoción de marca.
Từ Ánh Nguyệt, representante del Departamento de Turismo de An Giang, subrayó la importancia de la formación. Según ella, para que el modelo sea sostenible, la comunidad debe ser el eje principal, pero necesita ser guiada paso a paso.
“Desde la organización de los homestays, la seguridad alimentaria, hasta las habilidades de comunicación y narración cultural, todo debe estandarizarse. El objetivo no es solo mejorar la experiencia del visitante, sino también asegurar medios de vida duraderos para la población y evitar que las iniciativas se queden a medias”, explicó Nguyệt.
En cuanto a los productos turísticos, los expertos advirtieron que An Giang debe evitar la excesiva urbanización o comercialización que podría hacer perder la esencia rústica de la cultura local. El Dr. Nguyễn Anh Cường (Universidad de Cultura de Hanói) destacó la necesidad de preservar la autenticidad de la arquitectura y el estilo de vida tradicional. El desarrollo turístico debe ir de la mano con la conservación del patrimonio, utilizando ese patrimonio como fuente de sustento para la comunidad.
Otro tema discutido fue la promoción turística. En la era digital, incluso un buen producto difícilmente puede prosperar si no se da a conocer. Los participantes recomendaron a la provincia reforzar la transformación digital y difundir imágenes de las aldeas artesanales, festivales Cham y Khmer en plataformas en línea y redes sociales para atraer a turistas jóvenes y extranjeros.
Nguyễn Trung Thành, subdirector del Departamento de Turismo de An Giang, afirmó que la provincia está comprometida a trabajar estrechamente con la Administración Nacional de Turismo, empresas y organizaciones no gubernamentales para implementar programas de apoyo concretos. “Nos centraremos en construir modelos piloto de turismo comunitario, que luego se ampliarán a otras localidades”, aseguró.
El próximo paso de An Giang es completar su cadena de productos turísticos distintivos. Por ejemplo, combinar el turismo espiritual en la montaña Sam con experiencias culturales Cham en Tân Châu y el ecoturismo en el bosque de Trà Sư. Esta conexión ayudará a prolongar la estancia de los visitantes y aumentar su gasto, en lugar de visitas de ida y vuelta en un solo día.
